En la Casa de los Abuelos del municipio Quivicán reafirmé
la vieja tesis de que el amor no tiene edad. Luego de varias décadas de vida
dos inquilinos de esta colectiva morada comenzaron sus relaciones de novios
para contraer matrimonio cuando exista una total comprensión de sus planes
futuros
.En definitiva,
como dice un octogenario amigo de
barrio, soñar no cuesta nada. La felicidad aunque sea corta, siempre tiene un
valor incalculable, y eso les pasa a los amigos atrapados por el lente inquieto
de Carlos Cánovas.
No tengo los nombres de la pareja. Con todo respeto los
llamaré Pepe y Pepa ,y solo les doy un consejo :aceleren la máquina que les
queda poca gasolina para un viaje tan complicado.Felicidades.
Alberto Gutiérrez Walón Fotos Carlos Cánovas
Carlos Marcos Periodista de Mayabeque disfruto del grato momento. |
Recuerde el Amor no tiene Edad |
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